Esparcidas en el paisaje montañoso de las zonas altas de Honduras, se encuentran docenas de ciudades coloniales y aldeas pobladas por la colorida y tradicional cultura Lenca. En las plazas centrales de estas humildes aldeas se encuentran iglesias Españolas, algunas datan desde hace medio milenio hasta los primeros días de la conquista. Es un paisaje pintoresco de montañas cubiertas con pinos, hierba y pequeñas parcelas de maíz, frijoles y otros granos.
Los Lencas forman el grupo indígena más numeroso de Honduras, cubriendo la zona oeste y suroeste del país. Aunque perduran algunas palabras y nombres de lugares en el lenguaje Lenca, han desaparecido muchas tradiciones Lencas continúan prevaleciendo. Parte de sus tradiciones son la construcción de humildes viviendas, técnicas para cosechar los granos tradicionales, cocina tradicional, cerámica y el tejido de coloridas canastas, sombreros y alfombras.
Los Lencas forman el grupo indígena más numeroso de Honduras, cubriendo la zona oeste y suroeste del país. Aunque perduran algunas palabras y nombres de lugares en el lenguaje Lenca, han desaparecido muchas tradiciones Lencas continúan prevaleciendo. Parte de sus tradiciones son la construcción de humildes viviendas, técnicas para cosechar los granos tradicionales, cocina tradicional, cerámica y el tejido de coloridas canastas, sombreros y alfombras.
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